EL PÍCARO ANDRESILLO
Historia de una lucha sin tregua
Carta al posible editor de esta historia, que yo cuento porque me han contado:
A ver si le gusta a usted.
Vale.
* * *
CAPÍTULO 1
Que cuenta cómo el pícaro Andresillo nació en el molino de la Encrucijada, y que narra sus primeros años de infancia y la pésima educación fundamental que le fue dada por sus progenitores, Lucio el Tuerto y Marinda la Alegre, así como la forma en que a la temprana edad de cinco años fue vendido a unos gitanos feriantes que pasaban por el molino y que se lo llevaron a residir en los caminos, con un estilo de vida nómada y descuidado, y así hasta los diez años.
―Varón, es varón.
CAPÍTULO 2
Donde se podrá leer la ingeniosa forma en que Andresillo escapó de la compañía de los feriantes, una vez que hubo aprendido todas sus artes en la picaresca y en el trato con los demás, amén de otras muchas anécdotas graciosas y de gran deleite para el espíritu ocioso que busca distraemento en estas páginas.
Historia de una lucha sin tregua
Carta al posible editor de esta historia, que yo cuento porque me han contado:
A ver si le gusta a usted.
Vale.
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CAPÍTULO 1
Que cuenta cómo el pícaro Andresillo nació en el molino de la Encrucijada, y que narra sus primeros años de infancia y la pésima educación fundamental que le fue dada por sus progenitores, Lucio el Tuerto y Marinda la Alegre, así como la forma en que a la temprana edad de cinco años fue vendido a unos gitanos feriantes que pasaban por el molino y que se lo llevaron a residir en los caminos, con un estilo de vida nómada y descuidado, y así hasta los diez años.
―Varón, es varón.
CAPÍTULO 2
Donde se podrá leer la ingeniosa forma en que Andresillo escapó de la compañía de los feriantes, una vez que hubo aprendido todas sus artes en la picaresca y en el trato con los demás, amén de otras muchas anécdotas graciosas y de gran deleite para el espíritu ocioso que busca distraemento en estas páginas.
.
―Tres maravedís por él.
CAPÍTULO 3
En que se dan detalles de los primeros amoríos de Andresillo, ya mozo, y de las distintas y modernas formas de ganar el sustento que usó el pícaro, quien, angustiado por la necesidad y la calamidad, recaló en una compañía teatral, también errante, conocida como La carreta del tío Osvaldo y sus títeres.
La carreta era vieja y olía a humedad.
CAPÍTULO 4
Donde aparece impresa la famosa aventura del paso del Puente de la Cebada y el enfrentamiento que se vivió entre Andresillo el pícaro y Tostón, sempiterno enemigo suyo, que a la postre le quitaría el puesto en La carreta del tío Osvaldo y sus títeres y le substraería los favores de la bella Elisenda.
―¡Hi de puta, Tostón!
CAPÍTULO 5
Capítulo en el que se narra lo que leerá el que lo leyere, el que pasare la vista por sobre los renglones ordenados, el que viere con detenimiento y atención las palabras colocadas con el orden y el concierto oportunos, el que escuchare recitarlas a algún trovador que le hiciere el favor de pronunciarlas en su presencia o el que usare cualquier otro medio para enterarse de lo que se narra en este capítulo en el que se cuenta lo que sabrá el que lo leyere.
Así es.
CAPÍTULO 6
Reflexión acerca del tiempo, el dinero, la virtud, el honor, el egoísmo, el pecado, el cielo, la muerte, el dolor, el placer, la mujer, el trabajo, el nacimiento, los antepasados y el delirio, por parte del pícaro Andresillo, antes de que éste entrara en la feria de Medina del Campo, que a la sazón habría de significar un vuelco definitivo para su vida, sus andanzas, sus correrías y sus desvelos en esta tierra de pecadores y maldicientes.
―Pues lo mismo, digo yo que, en fin...
CAPÍTULO 7
En que se narra la disipada vida que Andresillo llevó en la casa de la vieja Úrsula, rehacedora de virgos, buscona, bruja y otras cosas que aquí no vienen a cuento porque no influyen de forma determinante en las ulteriores vivencias del pícaro.
CAPÍTULO 3
En que se dan detalles de los primeros amoríos de Andresillo, ya mozo, y de las distintas y modernas formas de ganar el sustento que usó el pícaro, quien, angustiado por la necesidad y la calamidad, recaló en una compañía teatral, también errante, conocida como La carreta del tío Osvaldo y sus títeres.
La carreta era vieja y olía a humedad.
CAPÍTULO 4
Donde aparece impresa la famosa aventura del paso del Puente de la Cebada y el enfrentamiento que se vivió entre Andresillo el pícaro y Tostón, sempiterno enemigo suyo, que a la postre le quitaría el puesto en La carreta del tío Osvaldo y sus títeres y le substraería los favores de la bella Elisenda.
―¡Hi de puta, Tostón!
CAPÍTULO 5
Capítulo en el que se narra lo que leerá el que lo leyere, el que pasare la vista por sobre los renglones ordenados, el que viere con detenimiento y atención las palabras colocadas con el orden y el concierto oportunos, el que escuchare recitarlas a algún trovador que le hiciere el favor de pronunciarlas en su presencia o el que usare cualquier otro medio para enterarse de lo que se narra en este capítulo en el que se cuenta lo que sabrá el que lo leyere.
Así es.
CAPÍTULO 6
Reflexión acerca del tiempo, el dinero, la virtud, el honor, el egoísmo, el pecado, el cielo, la muerte, el dolor, el placer, la mujer, el trabajo, el nacimiento, los antepasados y el delirio, por parte del pícaro Andresillo, antes de que éste entrara en la feria de Medina del Campo, que a la sazón habría de significar un vuelco definitivo para su vida, sus andanzas, sus correrías y sus desvelos en esta tierra de pecadores y maldicientes.
―Pues lo mismo, digo yo que, en fin...
CAPÍTULO 7
En que se narra la disipada vida que Andresillo llevó en la casa de la vieja Úrsula, rehacedora de virgos, buscona, bruja y otras cosas que aquí no vienen a cuento porque no influyen de forma determinante en las ulteriores vivencias del pícaro.
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―¡Eso me duele, eso me duele, Úrsula!
CAPÍTULO 8
En que se apunta cuidadosamente la grande empresa que acomete Andresillo el pícaro cuando decide colocarse al amparo del conde de Zopilotes y cumple fielmente todas las misiones que su señoría le encomienda, escalando de tal manera un peldaño del zigurat que son la vida y las relaciones humanas, determinadas en gran medida por el nacimiento, la suerte y el ingenio de cada cual.
―Andresillo, me vas a ir a por tabaco.
CAPÍTULO 9
En que se halla escrita la retirada de la vida pícara y buscona de Andresillo, que accederá por fin a la conducta honrada que llevaba persiguiendo durante más de veinte años y a la cual tendrá derecho después de su casamiento con Elisenda la bella, tras lo cual ambos se trasladarán a la villa y corte y comenzarán a vivir de lo que ganan en un taller de cuero.
―Sí, quiero.
EPÍLOGO
O donde encontramos relatada la muerte de Andresillo a manos de Tostón en una reyerta que tiene lugar en la Taberna de los Cuchilleros.
Qué bueno era.
COPLAS POR LA MUERTE DE ANDRÉS
Andresillo, Andresillo,
qué pícaro y qué listillo.
FIN
CAPÍTULO 8
En que se apunta cuidadosamente la grande empresa que acomete Andresillo el pícaro cuando decide colocarse al amparo del conde de Zopilotes y cumple fielmente todas las misiones que su señoría le encomienda, escalando de tal manera un peldaño del zigurat que son la vida y las relaciones humanas, determinadas en gran medida por el nacimiento, la suerte y el ingenio de cada cual.
―Andresillo, me vas a ir a por tabaco.
CAPÍTULO 9
En que se halla escrita la retirada de la vida pícara y buscona de Andresillo, que accederá por fin a la conducta honrada que llevaba persiguiendo durante más de veinte años y a la cual tendrá derecho después de su casamiento con Elisenda la bella, tras lo cual ambos se trasladarán a la villa y corte y comenzarán a vivir de lo que ganan en un taller de cuero.
―Sí, quiero.
EPÍLOGO
O donde encontramos relatada la muerte de Andresillo a manos de Tostón en una reyerta que tiene lugar en la Taberna de los Cuchilleros.
Qué bueno era.
COPLAS POR LA MUERTE DE ANDRÉS
Andresillo, Andresillo,
qué pícaro y qué listillo.
FIN